Salsa verde casero, Receta!
|la salsa verde casera es una preparación sencilla pero esencial en la cocina mexicana. Con ingredientes frescos y un proceso de cocción y licuado fácil, se obtiene una salsa llena de sabor y adaptable a diferentes platillos. Su opción de freírla para intensificar el sabor la convierte en una receta versátil y deliciosa, adecuada para cualquier ocasión.
La versatilidad de la salsa verde permite utilizarla en diversos platillos como tacos, enchiladas, tamales, o simplemente como salsa para acompañar chips de tortilla. Su frescura y sabor la convierten en un acompañamiento perfecto para realzar cualquier comida mexicana.
Aquí está la receta completa de salsa verde casera:
Ingredientes:
- 500 g de tomates verdes (tomatillos), pelados y lavados
- 2-3 chiles serranos o jalapeños (ajustar al gusto)
- 1/2 cebolla mediana, picada
- 2 dientes de ajo, pelados
- 1/4 taza de cilantro fresco, picado
- 1 cucharadita de sal (ajustar al gusto)
- 1 taza de agua
- 1 cucharada de aceite vegetal (opcional, para un toque de sabor adicional)
Instrucciones:
Preparar los ingredientes:
Pela y lava los tomates verdes.
Pica la cebolla y el cilantro.
Pela los dientes de ajo.
Cocinar los tomates y chiles:
En una olla grande, coloca los tomates verdes, los chiles serranos o jalapeños y los dientes de ajo.
Añade el agua y lleva a ebullición. Cocina a fuego medio-alto hasta que los tomates cambien de color y estén tiernos, aproximadamente 10-15 minutos.
Licuar la mezcla:
Con una espumadera, retira los tomates, los chiles y los ajos de la olla y colócalos en una licuadora.
Añade la cebolla picada, el cilantro y la sal.
Licúa hasta obtener una salsa suave. Si la salsa está demasiado espesa, añade un poco del agua de cocción reservada para ajustar la consistencia.
Opcional: Freír la salsa:
En una sartén grande, calienta una cucharada de aceite vegetal a fuego medio.
Vierte la salsa licuada en la sartén caliente y cocina a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, durante unos 5-10 minutos. Esto ayuda a intensificar los sabores.
Ajustar el sabor:
Prueba la salsa y ajusta la sal si es necesario.
Si prefieres una salsa más picante, puedes añadir más chiles al licuar.
Servir:
Deja enfriar un poco antes de servir.
La salsa verde se puede utilizar caliente o fría y es perfecta para acompañar tacos, enchiladas, tamales, o como salsa para cualquier platillo mexicano.
¡Disfruta de tu salsa verde casera, llena de sabor y frescura!